2ª Parte.
El fotoenvejecimiento provocado por la exposición excesiva a la luz solar se ha convertido en los últimos años en un gran problema.
Los compuestos bioactivos de las macroalgas pueden absorber los rayos UVA y UVB; algunos de ellos eliminan ROS e inhiben la formación de MMP.
Varios extractos de diferentes algas exhiben funciones fotoprotectoras. Los compuestos absorbentes de UV más eficientes son los MAA, que son sustancias solubles en agua que se encuentran en muchos organismos, como las cianobacterias y las algas.
La búsqueda de agentes blanqueadores de la piel seguros y efectivos a partir de algas marinas puede ser beneficiosa para la industria cosmética. Para encontrar nuevos agentes anti-oscurecimiento y blanqueadores, los científicos examinaron varias algas marinas en busca de inhibidores de tirosinasa y encontraron algunas algas potenciales. Varias especies de microalgas son explotadas en la industria cosmética, especialmente en el mercado del cuidado de la piel, siendo las principales Arthrospira y Chlorella.
Fotobioprotectores a base de microalgas
El problema de toda la industria de la cosmetología es el desarrollo de protectores solares sin un conocimiento completo sobre su uso, compatibilidad, rendimiento y fotoestabilidad. Se ha detectado que diferentes sustancias químicas como el metoxicinamato de octilo y la benzofenona-3 se utilizan únicamente para aumentar los niveles del factor de protección solar (FPS) en los protectores solares. Esto no es posible, ya que en el caso del octil metoxicinamato, la concentración máxima de uso permitida a nivel mundial es del 10%, y con esta concentración solo se puede lograr un SPF de 8 de protección. En el espectro de radiación UVB y con benzofenona-3, la concentración máxima permitida a nivel mundial es del 10%. Adicionalmente, se han reportado sus efectos nocivos en ambientes marinos.
Por otro lado, el uso de algas marinas como filtros solares es más eficiente, duradero y biodegradable que otros componentes químicos tradicionalmente utilizados, que contribuyen a una menor contaminación del agua y a una mayor eficiencia en la absorción de los rayos ultravioleta. Se ha demostrado que la posibilidad de incluir moléculas MAAs que contienen algas de forma natural en las cremas de protección solar les permite ser más efectivas y duraderas. Se ha confirmado que la estabilidad de los MAA dura hasta 270 °C, lo que representa la estabilidad del 100 % después de 6 h bajo el sol y puede aumentar el grado de fotoprotección.